-¡Paco!, un escarabajo...
-¿Dónde?
-En el baño.
-Voy.
-¡Llévatelo!
-Pero bueno, ¡qué sorpresa! ¿Pero qué haces tú aquí, encima de una toalla?
Y es que se trataba de un coleóptero adulto, un escarabajo muy conocido, el llamado "escarabajo de la patata" o "dorífora" (Leptinotarsa decemlineata).
La escena tuvo lugar el pasado 19 de mayo de 2022, en una casa de Piedrabuena. El insecto se encontraba sobre una toalla. En esta casa no hay plantas de patata. Desconozco si en las cercanías puede haber algunas. Aunque debemos recordar que también se alimenta de otras plantas "solanáceas" como las tomateras y las berenjenas, por ejemplo.
Es curiosa la variedad de nombres que recibe el escarabajo de la patata. En francés se le llama "doryphore", vocablo procedente del latín, que también aparece en algunos textos españoles. Fue el apelativo que daban a los soldados alemanes durante la II Guerra Mundial. En inglés sorprende que sea conocido como "Escarabajo de Colorado", "Colorado Beetle", entre otros. En italiano usan "dorifora della patata". Parece lógico, dado el origen del término, que viene a decir "que porta una lanza", en latín.
Lo cierto es que este curioso escarabajo, como se sabe, procede de América del Norte. En realidad su área original de distribución se encontraba en México pero fueron los conquistadores españoles, primero, y después, los bisontes, la construcción del ferrocarril y los colonos del norte de Europa los que produjeron ese avance hacia los actuales Estados Unidos y Canadá. Además, su área de distribución no coincidía con la de la patata sino con una planta "prima hermana", que también fue extendiéndose por el norte de Estados Unidos. Dado que la especie fue estudiada y descrita con ejemplares del estado de Colorado, recibió ese nombre en inglés.
Su llegada al continente europeo supuso todo un acontecimiento no sólo entomológico sino económico, agrológico, técnico y social, ya que su expansión fue rapidísima y los daños en un cultivo tan importante como la patata, cuantiosos...Sus primeras apariciones en suelo europeo se produjeron en el siglo XIX aunque fueron puntuales y erradicadas rápidamente. De manera que el escarabajo de la patata estuvo más de cuarenta años "intentando" establecerse por Europa.
El punto de entrada parece ser que fue Burdeos, en 1922, y desde allí se fue extendiendo por todo el continente. A la Península Ibérica llegó en 1935. El lugar, un pequeño pueblo del Ampurdán, Maçanet de Cabrenys, en la provincia de Gerona. Pronto se empezó el seguimiento, el estudio y el control pero fueron años muy difíciles, en casi todos los aspectos. La guerra supuso una dificultad más.
En los años inmediatamente posteriores a la Guerra Civil Española (1936-1939) los avances de la plaga eran seguidos por los expertos que, mayoritariamente, en aquella época, eran los ingenieros agrónomos y los de montes. En los "Boletines de Patología Vegetal y Entomología Aplicada" aparecían estudios y el seguimiento que se venía haciendo sobre esta plaga.
En el año 1944 se publicó un trabajo titulado "La progresión del escarabajo de la patata durante los años 1943 y 1944" de A. Alfaro. En él, el autor aporta la evolución de este escarabajo alóctono y cómo, en sólo dos años, ya ha colonizado nuevos territorios.
Nos habla del factor temperatura como determinante para que se produzcan los vuelos de los ejemplares adultos. Así, por encima de 25 grados centígrados, la dispersión está asegurada. Además, aporta información sobre los tratamientos que se vienen dando y los éxitos conseguidos, frente a la idea inicial prevalente de que, una vez establecida, no se sería capaz de frenar la plaga y se darían por perdidas las cosechas. Una de las claves de su éxito estriba en que puede llegar a reproducirse tres veces en un año. Además, una hembra pone hasta seiscientos huevos. Parece ser que una sola pareja puede llegar a producir dieciséis millones de nuevos escarabajos.
Para el caso que nos ocupa, la provincia de Ciudad Real, observamos como de los 36 términos municipales en los que hay "focos" en 1943, se pasa a la totalidad de los mismos en 1944, es decir, a los 100. Hay una breve descripción del área, que pone de manifiesto cómo el escarabajo de la patata se estableció en nuestra provincia en la mitad oriental, por el Campo de Calatrava y los Montes de Toledo:
"En la provincia de Ciudad Real aparece con focos más o menos diseminados la porción situada al Norte del río Jabalón y, después de la unión de éste con el Guadiana, discurre la zona de vanguardia por Piedrabuena y el curso ascendente del Bullaque, hasta la cuenca inicial del río Estena, por donde alcanza el límite común entre esta provincia y las de Toledo y Badajoz. Separado de ella queda también con focos de escarabajo el término de San Lorenzo de Calatrava, contiguo a la provincia de Jaén".
Ejemplar de escarabajo de la patata (Leptinotarsa decemlineata", en una actividad educativa en un colegio Público de Ciudad Real, en mayo de 2022.Es curioso como un simple invertebrado puede acarrear tantos problemas pero, a la vez, tantos esfuerzos colectivos para controlarlo.
De alguna manera, "gracias" al escarabajo de la patata se organizó el primer congreso internacional sobre un insecto (enero de 1936 en Bruselas) o se crearon organismos internacionales centrados exclusivamente en la protección de las plantas, concretamente la "Organización Europea y Mediterránea para la protección de las plantas", en 1951.
Ya en fecha tan temprana como 1875 se prohibió la entrada de patatas americanas en varios países europeos siendo Francia el primer país que promulgó un decreto ese año al respecto. Y sólo dos años más tarde, en 1877, en Gran Bretaña se dicta la primera ley del mundo contra un insecto, la llamada "Destructive Insects Act" (Ley de insectos destructores).
Además, fue motivo de polémicas de todo tipo, incluyendo las acusaciones entre países beligerantes por haber sido utilizado como arma biológica de guerra. Y es que en la Segunda Guerra Mundial el escarabajo de la patata fue utilizado por varios países, de los dos bloques, para dañar a sus enemigos. Hay acusaciones que no se han podido demostrar pero algunas iniciativas se sabe fehacientemente que se pusieron en práctica. Estadounidenses, ingleses, alemanes y soviéticos, como mínimo, anduvieron con esas malas artes para debilitar a sus contrincantes.
De las formas de solucionar el problema o de disminuir lo más posible sus efectos nocivos se ha ido aprendiendo mucho pero, a su vez, la especie se ha hecho cada vez más resistente a los venenos, por lo que sigue siendo un reto mundial en el que trabajan miles de personas.
Y yo, simple amante, estudioso y fotógrafo de la Naturaleza, como maestro de escuela, observo a este pequeño animal con curiosidad y un tanto desconcertado porque no sé qué debo hacer con el ejemplar que llegó al cuarto de baño de mi casa. Por lo pronto, mi alumnado, unos cuarenta chicos y chicas de siete años ya saben algo de este escarabajo que tantas "batallas" y luchas de todo tipo ha protagonizado.