viernes, 29 de abril de 2022

"Callegrafías" de Antonio E. Ojeda, o la pervivencia del instante.

Hoy, 29 de abril de 2022, viernes, ha quedado inaugurada la exposición "Callegrafías" de Antonio E. Ojeda en el Bar-Galería "El Canguro Violeta" de Piedrabuena, Ciudad Real.

En esta selección de 23 fotografías el autor nos aclara, en un breve texto, algo sobre su captura de instantes únicos, fugaces e irrepetibles. "La fotografía es magia que nos revela una realidad oculta y las fotos que hago son un intento de mostrar esa realidad al mismo tiempo que un intento de fijar lo efímero", añade.Y esas fracciones de segundo, esos momentos únicos, curiosamente, perviven y nos hablan, nos interpelan, nos narran fragmentos de historias, de vivencias, de sensaciones que, tal vez, nos resulten cercanos y tan elocuentes como otros estilos de fotos. Esa pervivencia del instante tiene la fuerza, precisa y paradójicamente, de lo efímero, de lo volátil, y las sombras y contraluces nos dicen mucho más que las propias figuras, casi siempre en movimiento.

Además de esa magia del momento, con sombras, contraluces y movimientos se recrea el autor en la combinación de colores y formas, buscando unos juegos visuales de gran belleza. En esos curiosos escenarios la arquitectura, o mejor, las arquitecturas -a veces dispares- juegan un papel muy importante, siendo incluso, protagonistas del mensaje. Simetrías y contrastes de todo tipo jalonan la muestra, en la que también podemos ver escenas del mundo rural, de personas y algunos animales.

Otro acierto del autor, nos cuenta Mariano Rivero, el empresario y fotógrafo, es la elección del papel mate, que da una apariencia muy interesante a las copias.

Para ir concluyendo estas callegrafías, parafraseando a un escritor que tuve la suerte de escuchar, hablando de uno de sus libros, tienen algo, mucho, me atrevo a decir, de "espiritugrafías", de interpretaciones de nuestro mundo, llamado y caracterizado por un autor francés precisamente como "el imperio de lo efímero" dónde, paradójicamente, lo que permanece, lo que nos muestra el autor, es la pervivencia del instante.

Desde este pequeño rincón, recibe, Antonio, mi enhorabuena. Igualmente, felicito a Mariano por su buen hacer expositivo y fotográfico, en estos momentos tan inciertos en los que se podría pensar que la Fotografía es sólo cosa de instituciones o del mundo virtual, que parecen concentrarlo todo. Seguimos contando con iniciativas individuales y grupales de gran interés y con fotógrafos cuyo discurso merece la pena ser disfrutado en la calma de espacios como el Canguro Violeta.




Hoy se inaugura la exposión fotográfica "Callegrafías" de Antonio E. Ojeda en "El Canguro Violeta" de Piedrabuena, Ciudad Real.

 Hoy, 29 de abril de 2022, viernes, se inaugura la exposición fotográfica "Callegrafías" del sevillano Antonio E. Ojeda.

Sobre el autor podemos ver un buen número de imágenes en internet y algunos textos, entre los que seleccionamos algunas críticas muy positivas y una entrevista que nos explica la trayectoria autodidacta y los quehaceres actuales de este interesante fotógrafo.

"Psilocybe", trabajo sobre "las setas", de Sevila...




sábado, 23 de abril de 2022

La comunidad rumana celebra la Pascua de Resurrección en Villarrubia de los Ojos, 23 de abril de 2022.

Ayer, 23 de abril de 2022, sábado, a las once de la noche, comenzó la celebración de la Pascua de Resurrección en Villarrubia de los Ojos, Ciudad Real, España. El acto, organizado por el Obispado Ortodoxo Rumano fue oficiado por el padre Andrei y seguido por un gran número de fieles rumanos.

La Pascua se celebró en la capilla de la Paz, cedida por la parroquia del municipio. Prácticamente toda la ceremonia es cantada, tanto por el sacerdote como por los fieles, que portan velas encendidas. Primero salen del templo y tras orar y cantar el padre llama tres veces a la puerta, entrando después, como señal de la resurrección de Cristo. Posteriormente se encenderán las luces. 

Al llegar al final tiene lugar la comunión, -pan y vino- que, por las circunstancias actuales, es repartida en pequeños recipientes a todos los presentes. El padre Andrei lee una carta del Obispado y agradece la presencia y la especial colaboración de Simona y Jesús, que han patrocinado los gastos. Aunque no hablo rumano sí percibo algunas frases, como una mención especialmente significativa sobre Ucrania y la terrible tragedia que están viviendo allí. Los fieles van recogiendo la comunión y el padre les va haciendo la señal de la cruz en la frente, con agua bendita (así me lo parece). Es el momento de depositar, voluntariamente, las ofrendas económicas en un pequeño cesto.

El acto es muy hermoso y sentido y los más pequeños, chicos y chicas, cobran un especial protagonismo también en los últimos momentos. Reciben unos huevos de Pascua y un zumo. Al salir se nos reparte una estampa como recordatorio. La Pascua concluye a las dos y veinte de la madrugada pero allí se quedan unas cuantas personas, recogiéndolo todo. El suelo estaba cubierto con un plástico para evitar derrames de cera y los bancos se habían colocado en los laterales del templo. Algunos objetos religiosos son custodiados en un local de la calle Convento, como la preciosa cruz de madera, obra de un verdadero artista de la madera, también rumano, que ha dejado su impronta en Villarrubia de los Ojos. Algunos participantes, casi todas mujeres y niños, van vestidas con trajes regionales, de vistosos colores. También es especialmente destacable el trabajo realizado por el coro, cantando y leyendo a lo largo de toda la ceremonia.




























Cartel en el Bar La Plaza (Bar de Ramona), ayer, 23 de abril de 2022, sábado.


 













Villarrubia de los Ojos en el Diccionario Enciclopédico Espasa de 1988.

  En 1988 la famosa editorial Espasa-Calpe publicó en edición abreviada su Diccionario Enciclopédico. Como se sabe la Enciclopedia Espasa o, coloquialmente, "la Espasa", es el diccionario enciclopédico más completo que se ha publicado en lengua castellana. Era 1908 cuando los primeros tomos vieron la luz. No se concluyó hasta 1930 pero se siguieron ampliando contenidos, en unos casos, e incluyendo otros nuevos.

Es una fuente de información impresionante y, a mi modesto entender, una verdadera joya bibliográfica. La editorial siguió publicando, además, otros diccionarios y enciclopedias, en diferentes formatos y fechas, abreviados, aunque se seguían publicando tomos de actualización de la primera enciclopedia.

Así, en 1988 lanzaron su edición abreviada, en sólo 18 tomos. Seguía siendo una casa de prestigio editorial. Ayer, por curiosidad, consulté la entrada correspondiente a Villarrubia de los Ojos, municipio de Ciudad Real. Me llevé una sorpresa un tanto decepcionate. La información aportada es, en realidad, la de la primera edición de finales de los años 20 del siglo XX. Sólamente se actualizó el dato correspondiente a la demografía. Me vinieron a la memoria mis primeras lecturas de este monumento enciclopédico, cuando descubrí el gran potencial informativo, documental y didáctico que atesora. Así, con esas lecturas de las que hablo, conocí realidades en los años setenta y ochenta que me parecían sorprendentes y que me permitían tener una visión histórica muy diferente a la que me había formado hasta entonces. Utilicé esos datos para indagar en nuestro pasado, preguntando a mis mayores, hablando, escuchando, leyendo y buscando huellas de esos tiempos. A veces me choqué con esas curiosas actitudes de negarlo todo por parte de personas que desconocían el tema en cuestión. Incluso una vez una persona mostró su disconformidad ante lo que yo decía para, al cabo de unos meses, contarme lo mismo, pero ya con más detalles, que había conseguido, porque esa información concernía directamente a su familia. Por cierto, la fotografía que aparece es muy interesante ya que muestra la iglesia parroquial desde la calle Iglesia antes de que se construyera el chapitel, siendo visible uno de los nidos de cigüeña común que allí había.

En fin, los diccionarios y los diccionarios enciclopédicos son verdaderos tesoros que debemos conservar, valorar y, lógicamente, utilizar. Valga esta entrada como mi pequeña contribución al Día del Libro, hoy, 23 de abril de 2022, en Villarrubia de los Ojos.






sábado, 16 de abril de 2022

Domingo Santo,17 de abril de 2022: Resurrección de Jesús.

 Ya es Domingo de Resurrección. Doce de la noche. La iglesia está llena de cofrades y acompañantes y el exterior, también. Se respira un aire diferente. Los y las cofrades no llevan capirucho con el capillo. Las tres hermandades se mezclan al azar: blancos, moraos y verdes se van disponiendo en filas. El cofrade morao que porta la carraca la hace sonar. Los hermanos empiezan a caminar. Salen las carrozas con el Sepulcro vacío, con Jesús resucitado y María Santísima de la Amargura. Hay dos itinerarios que se encontrarán pronto.

Al cabo de un rato escuchamos, ya desde casa, el repique de las campanas.

Faltan fotos.

Viernes Santo en Villarrubia de los Ojos, 15 de abril de 2022: El Santo Entierro.

 A las ocho y media de la noche comienza la procesión del Entierro. Por la calle Emilio Nieto llegan "Los Moraos" pasadas las diez y media. Este año, como cada cinco, toca sacar las imágenes en orden cronológico, independientemente de la cofradía que las porte. A las doce menos cuarto de la noche pasa, cerrando la procesión, el toto-terreno de Protección Civil. En segundo lugar vienen "Los Verdes" y por último, "Los Blancos". Militares y músicos van descubiertos y ni la música de la banda de música de Villarrubia de los Ojos ni la de tambores y cornetas sosiegan al gran número de niños y niñas que participan. La mayoría van en el centro, juntos, en un alegre desorden. Otros, bastantes, van con sus madres o padres, en las filas. Un buen número, en carritos o en brazos. Muy pocas personas acompañan al sacerdote, don Julián Plaza Pérez de Madrid y a las autoridades, representadas por el alcalde, don Miguel Ángel Famoso y la concejala del partido en la oposición, doña Encarnación Medina Juárez.




Viernes Santo en Villarrubia de los Ojos, 15 de abril de 2022: Los Encuentros.

 Es de noche. Son las seis y veintipico minutos y se ve gente, apresurada, que va hacia la iglesia. Nos cruzamos con algunos cofrades verdes, que vienen de velar al Santísimo, puesto que les tocan las últimas horas. Ya en la puerta de la Iglesia hay un buen número de cofrades y bastantes personas que esperan ver la salida de los pasos.

Primero salen Los Moraos y después Los Blancos. Cada cofradía, con sus particularidades, nos arrancan muchos aplausos con ese gran esfuerzo y habilidad para sacar sus imágenes. Además de varios fotógrafos ha venido la Televisión de Castilla-La Mancha (CMM).

Acto seguido los Moraos van hacia la calle...y los Blancos bajan por la calle de la Iglesia, rezando el rosario. Las oraciones las va rezando un joven, con ayuda de un micrófono. En la confluencia de la calle Empedrada con la calle de la Soledad tiene lugar el primer Encuentro. La imagen del Cristo gira ciento ochenta grados y sufre la primera caída. Los costaleros tienen que adelantar una pierna y retrasar la otra, subiéndose un poco la túnica, para poderse arrodillar. En ese momento, los Blancos, literalmente corriendo con pasos muy cortos y rápidos, se dirigen con la Virgen hacia Jesús. Un costalero grita y frenan de golpe, a escasos centímetros de la carroza nazarena. Los costaleros levantan, con fuerza a Jesús. Sigue cada cofradía su recorrido hasta el segundo Encuentro, que tendrá lugar entre las calles Charcazo, Grande, y Concepción. Y el tercero y último lo vemos en la calle de la Iglesia y la calle Paradores. Para esta ocasión son las dos carrozas de los Blancos, la portada por costaleras y la de las costaleras, las que se lanzan hacia Cristo.

Ya, muy cerca de la iglesia parroquial, las imágenes van entrando con sus correspondientes movimientos y sobre-esfuerzos, dadas las dimensiones de las mismas y las de la puerta de acceso. Nos llaman mucho la atención todas pero, quizás, nos sorprende un poco más ese "paso ligero" de la Verónica y Santas Mujeres de Jerusalen.

En el interior se ubican, también con intensidad emocional, las carrozas. Abrazos, besos, saludos y felicitaciones se suceden, con regalos de flores de los pasos a los participantes. Mientras tanto, en la capilla del Santísimo siguen algunas mujeres orando. 

Y se inicia otro proceso. Las camareras, con ayuda de escaleras, inician su delicado trabajo: desmontar los pasos y preparar los de la tarde y noche. Una labor callada y que no nos debería pasar desapercibida, llevada a cabo con mucho gusto, esfuerzo personal y económico. 


Faltan fotos.
















jueves, 14 de abril de 2022

Viernes Santo en Villarrubia de los Ojos, 15 de abril de 2022: La Oración en el Huerto.

 Doce en punto de la noche. La expectación se palpa en el ambiente. Dos años sin procesionar por la pandemia de Covid-19 hacen que se espere con una especial alegría este momento. Este año, además, ha habido renovación de la junta directiva. Hace unos días comenzó su andadura el nuevo presidente, Pedro Antonio. El saliente, Valentín Mora Vallejo, se despedía, agradecido, en el número 15 del Boletín   "Hermandad de la Esperanza", tras veintiocho años de hermano mayor. ¡Enhorabuena a ambos!

La calle Emilio Nieto, en la fachada de la Capilla de Los Verdes está abarrotada de gente. Algún que otro cofrade blanco y morado dan un toque de color. Los Verdes están en el interior, junto a la banda de música y las autoridades. Suena la campana y un cofrade corre la verja. Suena el himno de España y empiezan a salir hermanos y hermanas de la Esperanza, la Hermandad de Jesús en el Descendimiento y María Santísima de la Esperanza. Los primeros costaleros son los chicos y chicas, que portan al Niño Jesús carpintero. A continuación, unas cincuenta mujeres sacan a hombros la Oración en el huerto. Y para terminar, la Virgen de la Esperanza, precedida de los acólitos, hace su vibrante aparición. Los capataces, Tomás y Enrique, nos emocionan con sus palabras, así como las costaleras y los costaleros, con sus rítmicos y sincronizados movimientos. 

Entre ovaciones, música, incienso y multitud de móviles y cámaras, comienzan su largo recorrido las y los cofrades. Giran enseguida a la derecha por la calle de Santa Ana para seguir hasta la iglesia. Les esperan más de cuatro largas horas, cargadas de ilusión y devoción. Vuelvo a ver la procesión en la calle de la Iglesia y, un poco más tarde, en la Glorieta de la Constitución.  Delante de la casa del que fue el fundador de la cofradía, el doctor don Luis Villalobos Racionero las carrozas son giradas hacia su puerta. Y ya, por la calle Concepción enfilan hacia la calle Grande. Llegarán hasta san Juan, girarán por el Altillo, tomarán la calle Convento, allí, la Hermandad de san Isidro les ofrecerá un refrigerio, para volver a coger la calle Santa Ana, Emilio Nieto y retorno a la capilla.


Un buen rato antes de la salida.

En el interior de la capilla, con los últimos preparativos.

Doce en punto. Un cofrade corre la verja...




Cuerpo de Acólitos.


Tomás García-Retamero Luengo, el capataz de la Virgen de la Esperanza.

En la plaza de la Constitución.
Frente a la casa del fundador, el doctor, don Luis Villalobos Racionero.




Fotografías provisionales.

A las cuatro y pico de la noche van llegando los primeros cofrades a la capilla, terminando ya su largo recorrido. Hasta las cuatro y media no acaba la procesión, con la entrada de la Virgen de la Esperanza, con sus diferentes movimientos y bailes, su entrar y salir, la música y las últimas órdenes del capataz. Ya en el interior faltan algunos de los momentos más intensos y emotivos: se sitúa la carroza en su sitio y se canta la Salve. ¡Impresionante y muy emocionante!