El próximo viernes, 8 de julio 2022, inauguraremos la exposición "El álbum perdido" en El Canguro Violeta de Piedrabuena.
El álbum perdido.
Francisco Zamora Soria, Piedrabuena, junio 2022.
Hace unos años un vecino me regaló un bloc de dibujo de 46 x 65 cms marca Basik Gvarro ( Ref. 42, papel de 370 gramos), con 59 fotografías en blanco y negro. Lo había encontrado en el vertedero del pueblo y no constaba ningún dato del autor o autora, ni la fecha.
Esas fotografías, ampliadas en diferentes tipos de papel, de 18 x 24 cms, fueron hechas en la India y muestran en su totalidad personas de todas las edades, en su vida cotidiana.
Tras despegar cuatro de ellas para elaborar el cartel de esta exposición pude ver unas iniciales, que podrían ser las correspondientes a la persona que las hizo –LEH-, la fecha -agosto de 1977- y el lugar, Ladakh, India, todo escrito con bolígrafo rojo, por cierto.
Dada la casi nula información que tenemos nos planteamos muchas preguntas: ¿hombre o mujer?, ¿joven o adulto?, ¿fotógrafo profesional, aficionado, periodista, antropólogo…?, ¿viaje de placer, organizado, libre? ¿de Piedrabuena?.
Hemos indagado e incluso formulado algunas hipótesis pero no hemos conseguido más información que la que aparece manuscrita en algunas fotografías. Una de las personas consultadas opina que, de haberse tratado de alguien de nuestro pueblo, se habría sabido: años setenta y un destino tan lejano, caro y “especial” no sólo no estaba al alcance de la mayoría sino que, de alguna manera, denotaría un interés muy específico y poco común.
Lo cierto es que se trata de imágenes hechas, casi con seguridad, con una cámara réflex de 35 mm, con una intencionalidad artística, creativa o documental, con un fuerte componente antropológico. Son fotografías con sensibilidad, hermosas, en las que vemos niños y niñas, hombres y mujeres de todas las edades, y algunas escenas de tipo religioso, con baños en el Ganges o peluqueros y barberos en la calle. Hay unas cuantas que fueron hechas en el llamado Tíbet indio o Pequeño Tíbet, en Ladakh, al norte de la India, en Cachemira, o en Agra, en el Taj Mahal. A veces aparece, además de la fecha y el lugar, la altitud, por ejemplo, 2.700 o 3.500 metros. Vemos la vida cerca de los ríos, en los rituales religiosos pero también lavando la comida. En una aparece una vaca, el animal sagrado que tanta importancia tiene también en la economía de las clases menos adineradas y que tanto nos cuesta entender, por carecer de prácticamente toda la información necesaria.
La exposición muestra 30 fotografías que ponen de relieve esa mirada occidental, interesada por las personas y por lo más tradicional y diferente de nuestro mundo. Son especialmente significativas y “tiernas” las capturas fotográficas de niños así como las de mujeres y de personas de edad avanzada. Se aprecia cómo algunas se hicieron desde vehículos en marcha y desde edificios.
Todo parece indicar que se trató de una selección de 60 fotografías -de las que falta una- que se ampliaron y pegaron en este álbum.
Seguimos buscando e intentando identificar al fotógrafo o fotógrafa que hizo estas fotografías para, de alguna manera, dejar testimonio de su buen hacer. Agradecemos a la persona que las encontró que les prestara atención y que nos las hiciera llegar. Este álbum perdido nos ha abierto una ventana en el tiempo y en el espacio: 45 años atrás y miles de kilómetros alguien viajó a la India y quiso captar y perpetuar su mirada, llena de humanidad. Quienquiera que fuese sabía hacer fotos y captar esa vida que latía en las calles, en el campo, en los ríos y en los muchos espacios sagrados.
Desde este espacio expositivo, el Canguro Violeta, de Piedrabuena, agradecemos el trabajo prácticamente anónimo de esa persona viajera y fotógrafa así como a quién nos lo hizo llegar y, a Mariano Rivero que, para esta exposición que hace el número 99, la ha hecho posible.
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