Apuntes para recordar al artista José García Ortega (Arroba de los Montes, 1921-París, 1990): XIV. La doble muerte del pintor Ortega.

 Apuntes para recordar al artista José García Ortega (Arroba de los Montes, 1921-París, 1990): XIV.   

La doble muerte del pintor Ortega.  

Francisco Zamora Soria. 17 diciembre de 2023.

El artista José García Ortega nació en Arroba de los Montes un 19 de diciembre de 1921 y murió en París el 24 de diciembre de 1990. En realidad es como si hubiera muerto dos veces.

Por un lado está el hecho físico de su fallecimiento en un Hospital de París. Pero, tratándose, como se trataba, de un hombre público, de un político y, sobre todo, un artista de ámbito internacional, lo que ha ocurrido con él y su memoria es un verdadero óbito social, político e institucional. 

No se entiende que tenga obras en los mejores museos del mundo, que expusiera en las galerías más prestigiosas y cotizadas, que fuera reconocido públicamente, que aparezca en decenas de libros, catálogos de Arte y periódicos y que hoy,  a finales de 2023, sólo haya dos casas-museo en Italia y poco más. 

Cuando se cerró el Museo de Arroba de los Montes, el año 2001 el diario Lanza siguió manteniendo el anuncio de ese espacio expositivo durante años, como si nada hubiera pasado. 

¡Han pasado 22 años!

El museo sigue cerrado y en las paredes del Centro de Exposiciones de la Diputación de Ciudad Real se pueden ver copiss renovadas de algunas de sus obras. La ONG SOLMAN tiene una exposición itinerante, como una exequia temporal intermitente, como un ramo de flores que dura quince o veinte días. Bienvenida sea la iniciativa. 

Y esa es la segunda muerte de un artista que dedicó su vida a crear obras de Arte para que se vieran, no para que estuvieran en un depósito. La palabra ya de por sí tiene una carga expresiva fuerte. Sus obras, sus mensajes, su belleza, su dureza, su crítica...reposan sin grandes esperanzas de volver a ser vistas.

Es triste comprobar como, estando en una época en la que se habla de Inteligencia Artificial y de la Sociedad del Conocimiento tenemos estos cementerios repletos sin que sean siquiera noticia. 

El artista José Ortega merece un tratamiento diferente al que se le ha venido dando en su provincia, en su pueblo, en su región y en toda España. Tenemos una labor ingente esperando a ser realizada con su obra y su figura, para que su muerte sólo fuera la de 1990 y no la actual.