martes, 6 de diciembre de 2016

Escenas entomológicas, 2. La mantis de la mancha blanca (Sphodromantis viridis), más abundante de lo que parece.

La mantis religiosa es un insecto muy conocido. Forma parte de una familia, los Mantidae, del orden Mantodea.
En la península ibérica hay varias especies diferentes de mántidos a los que no se les presta atención por parte de ...¿el gran público? ¿los llamados medios de comunicación social? ¿el sistema educativo? ¿la gente?¿los ciudadanos de a pie? Parece evidente.
Esas especies suelen recibir el nombre de "mantis", si es que son vistas o percibidas. Sin embargo, si nos fijamos bien y consultamos con la bibliografía correspondiente o en internet, veremos que hay varias especies parecidas y que no es difícil distinguirlas. Una de ellas, la "mantis de la mancha blanca", la "Sphodromantis viridis", es más abundante de lo que se podría pensar. El gran parecido con la "Mantis religiosa" hace que nos pase inadvertida. A simple vista vemos esas manchas blancas en los élitros y la ausencia de manchas blancas y negras en la parte interior de las patas delanteras que nos hacen sospechar que se trata de una especie diferente. Por las citas que llevamos vistas nos atrevemos a conjeturar que la "Sphodromantis viridis", a la que llamamos "mantis de la mancha blanca", a falta de un nombre común o vernáculo, es más abundante de lo que parece.
En los dos meses pasados, por ejemplo, hemos dado con dos ejemplares en el interior del casco urbano de Piedrabuena, Ciudad Real. Una se encontraba en una fachada en la calle Guadiana y otra en la calle Emilio Enríquez, atropellada.






Vuelve a haber agua en Zuacorta, en el cauce del río Guadiana.

El domingo pasado, 4 de diciembre de 2016, se podía apreciar un pequeño charco de agua en el cauce del río Guadiana, en el paraje conocido como Zuacorta, entre Villarrubia de los Ojos y Daimiel.
Tras las lluvias de los últimos días es previsible que suba el nivel del agua en los puntos más bajos del cauce del río, completamente seco desde hace meses.
Además de la lluvia se empezará a notar la ausencia de extracciones para el regadío en toda la extensión del acuífero. Previsiblemente el agua empezará a aflorar como lo ha hecho en los últimos años, incluyendo los Ojos del Guadiana y los Ojuelos del río Gigüela.

miércoles, 30 de noviembre de 2016

Escenas entomológicas, 1. Nuevas citas de una mantis endémica descrita por el cura de los bichos en Ciudad Real, la "Apteromantis aptera".

Corría el año 1894 cuando el entomólogo y sacerdote don José María de la Fuente, conocido como “el cura de los bichos” describió una nueva especie de mantis, la denominada Ameles aptera. Lo hizo con ejemplares de Pozuelo de Calatrava, en la provincia de Ciudad Real.
A esa nueva especie, después de unos años, en 1932, le fue cambiado el nombre por el actual de Apteromantis aptera al ser incluida en un género diferente, Apteromantis.
Se trata de una especie de mantoideo endémica de la península Ibérica y de la que hay pocas citas. Es mucho más pequeña que la muy conocida mantis religiosa. En estado adulto mide poco más de dos centímetros. Su nombre científico viene a describir una de sus características más fácilmente observable, su ausencia de alas. Además, si la vemos, observaremos rápidamente que los ojos tienen una forma muy curiosa ya que en lugar de ser redondeados como en otros muchos insectos, presentan una especie de conos agudos dirigidos hacia la parte superior.
La “Mantis sin alas” suele tener una coloración verde y se desplaza a saltos entre las pequeñas hierbas de los ruderales en los que suele habitar.
Suele pasar inadvertida dado su escaso tamaño y su hábitat. Además, las pocas personas que perciben su presencia la consideran como un ejemplar joven de la mantis religiosa.
No está de más recordar que todavía está muy extendida la creencia de la peligrosidad de las mantis. En municipios como Arroba de los Montes recibe el muy expresivo nombre vernáculo de “muerte”. Por supuesto se trata de insectos inofensivos para el ser humano y que en realidad desempeñan una gran función controladora de otros invertebrados como los saltamontes. Merece la pena leer la ficha del MAPAMA del catedrático de Entomología Felipe Pascual Torres, disponible en internet.
La mantis sin alas Apteromantis aptera está protegida por la ley y es de gran importancia que se siga estudiando ya que es mucho más lo que se desconoce sobre ella que lo que se sabe, a día de hoy.
Las nuevas citas son del municipio de Piedrabuena, Ciudad Real. La primera se produjo en las cercanías del río Bullaque, el 7 de abril de 2015, en un herbazal en una antigua gravera. La segunda se produjo el pasado 18 de noviembre de 2016, a las afueras, a escasos metros del casco urbano, también en un herbazal de grama.
Es deseable que se sustituyan esas creencias por el conocimiento, que se empiecen a valorar y respetar.



Detalle de la cabeza de la mantis sin alas, Apteromantis aptera, especie de mantis endémica de la península Ibérica, y que fue descrita para la Ciencia por el entomólogo don José María de la Fuente, “el cura de los bichos” el año 1894. Fotografía de Francisco Zamora Soria.

(Este artículo fue enviado al diario Lanza, de Ciudad Real, sin éxito. También se intentó contactar con el diario La Tribuna de Ciudad Real, sin obtener respuesta.)
Rectificación, con mis disculpas, por delante y mi agradecimiento: El artículo fue publicado en el Diario Lanza el 26 de noviembre de 2016, en la página 39.

lunes, 24 de octubre de 2016

¿Halloween? ¡No, gracias! Celebrando la festividad del día de Todos los Santos en el colegio.

El calendario escolar se establece anualmente por parte de las autoridades educativas. En ese proceso intervienen los sindicatos y, de alguna manera, el resto de grupos implicados más directamente en la Educación.
Parece lógico que desde los primeros niveles educativos se trabaje el significado de cada fiesta. Un alumno o alumna puede estar muy identificado con determinada celebración y celebrarla, entenderla y vivirla y, sin embargo, desconocer otras.
Hay fiestas que tienen un marcado carácter religioso pero, en general, todas, han trascendido ese ámbito y se ha generalizado su seguimiento. En realidad es un complejo ejercicio de equilibrios...cambiantes e inestables entre la religión (o las religiones y sus diferentes tiempos), a veces el imperioso clima (o tiempo atmosférico), las tradiciones populares (en las que suele mezclar lo religioso con lo pagano hasta límites muy difíciles de discernir), la economía y, en particular, determinados trabajos, campañas, cosechas, labores, la política con sus vaivenes, sus deseos y sus hechos y sus contradicciones y, además, con las modas o tendencias  que van llegando de fuera o surgiendo de nuevas.
Evidentemente también hay diferencias regionales, provinciales y municipales importantes. Hay otras verdaderamente variopintas como puede ser la celebración de un evento llamado deportivo...
De manera que se hacen necesarias algunas reflexiones sobre estas cuestiones. Por un lado es aplicable el refrán del patrón y el marinero, es decir, si la autoridad declara una fiesta se debe observar y cumplir con la norma. Si, como es el caso, el alumnado y en ocasiones, las familias, no conocen el significado de determinadas festividades, lo aconsejable sería que, legalmente, se establecieran los medios para subsanar esas carencias. El voluntarismo puede ser plausible pero es, a su vez, en la mayoría de los casos, ineficiente, intermitente y no garantiza la consecución de los objetivos de los que hablamos, a pesar del gran valor que pueda tener.
Hace ya unos años, por ejemplo, la Consejería de Educación de Castilla-La Mancha ofrecía la posibilidad de celebrar un día más de carnaval -tres en lugar de dos-si se daba el compromiso por parte del profesorado de trabajarlo en los días previos. Parecía lógico.
¿Qué sentido tiene un día festivo escolar dedicado a la Constitución Española si el alumnado no sabe nada de ese tema? ¿Y del día de la Hispanidad o del Pilar? ¿Tiene sentido el día del Maestro o, con la terminología actual, el día de la Enseñanza si no median una serie de trabajos y actividades que hagan comprensible dicha celebración? ¿Y la fiesta de los Santos?¿Tiene sentido ese día de fiesta escolar sin programar absolutamente nada? ¿Es lógico que una fiesta que suele ser de las que más habitantes moviliza en toda España no se trabaje lo más mínimo en la Escuela? Se pueden y deben hacer tantas excepciones como sean necesarias. Y, acercándonos un poco más a esta peculiar fecha ¿es lógico que se haya generalizado la celebración de Halloween escolarmente también sin que haya mediado palabra? A mis alumnos y alumnas de seis años les digo que nadie olvida su cumpleaños para celebrar el de una persona desconocida...¡y eso es lo que estamos haciendo! ¿No sería más lógico dejar esa celebración, llamémosla anglófona o simplemente foránea, para el exclusivo aprendizaje del idioma y la cultura inglesas? ¿No se podría trabajar de forma atractiva y, dependiendo de los casos, no católica, esta fiesta? Yo, cuando tengo alumnas o alumnos musulmanes, les pido que nos hagan dibujos, que nos escriban redacciones, que nos enseñen fotografías, que nos cuenten su celebración de la fiesta del Cordero o del Ramadán. ¿Por alguna razón no se puede hablar del día de Todos los Santos? Por cierto, no es el día de ir al cementerio sino el que se celebra a todos los santos y santas de la Humanidad. Tampoco pasaría nada -más bien al contrario, sería aconsejable-por hablar del día de los Difuntos. Y, además del contenido religioso, está todo el acervo cultural de un país como España que, por si fuera poco, cuenta con el impresionante bagaje de América del Sur y Central.  No se podrá negar que no se celebra por falta de interés educativo sino por esta inercia comercial y económica interesada que nos ocupa y que lo invade todo, incluyendo algo tan importante como la Educación. En un libro especialmente significativo de Eduardo Galeano se puede leer una frase del siglo XIX que decía algo así como "hemos guardado un silencio muy parecido a la estupidez", con todo el respeto del mundo.
Así, ¿Halloween? ¡No, gracias!


Fragmento de papel en la calle en Málaga, 2009.


Publicidad en el suelo en Málaga, 2009.



Una niña vestida o disfrazada para Halloween, con su calabaza, observa unos bailes populares tradicionales ...


In memoriam: Valentín, el buscador de orquídeas y utopías.

Esta mañana el correo electrónico me ha dado una mala noticia. Un amigo me comunicaba la muerte de Valentín Rubio Galera, "Orqui" para los amigos.
Natural de la Puebla de Don Rodrigo, Valentín era guarda de la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Lo conocí hace ya unos años y, desde entonces, no paraba de sorprenderme y proporcionarme momentos de gran interés y satisfacción. Creo que era sencillamente una persona generosa que, buscando utopías, iba en realidad construyendo un presente mucho mejor a su alrededor.
Y quizás fuera una de sus grandes pasiones, las orquídeas, el mejor símil de su personalidad y de esa actitud tan vital y luchadora. Y es que Valentín era un gran amante de las orquídeas y de ahí ese apodo con el que lo conocíamos y con el que solía autodenominarse. Su dirección de correo electrónico o sus tarjetas de presentación ya lo dejaban bien claro: Valentín Rubio Galera, Buscador de orquídeas.
Y en ese buscar, investigar y recorrer con la vista el campo escudriñándolo todo, iba descubriendo, aprendiendo y, sobre todo, compartiendo. 
Valentín se enfrentó a una dura enfermedad como vivió, con fuerza y valentía. Su recuerdo nos acompañará y, a pesar del dolor, nos seguirá alumbrando y animando a vivir en un mundo que podemos ir mejorando, como él hacía, dándose a los que le rodeaban. Para mí ha sido una suerte, un privilegio en realidad, haberlo conocido. ¡Gracias Valentín por todo lo que me has dado!


domingo, 23 de octubre de 2016

Pequeño homenaje a grandes profesionales. A propósito del maestro de escuela Andrés Francia Villajos.

Este artículo fue enviado a La Tribuna de Ciudad Real el año pasado. No fue publicado.

Francisco Zamora Soria, maestro de escuela. Junio 2015.

Alguien dijo que en España, para recibir un homenaje, hay que morirse antes. A mí me gusta llevar la contraria y, afortunadamente, lo que pretendo es rendir mi pequeño homenaje a grandes profesionales que, año tras año, se jubilan y pasan a disfrutar del merecido descanso de la jubilación.
Me estoy refiriendo a los maestros y maestras de escuela pero reconozco que todas las profesiones me parecen igualmente importantes y dignas de elogio.
Quiero personalizar en una persona concreta este intento de reconocimiento de una profesión que no siempre es reconocida ni respetada. Para ser exacto, la figura del maestro o maestra (de cualquier profesional de la Educación, en realidad) viene siendo atacada desde hace ya demasiados años de forma tan sistemática que cuesta trabajo creer que se trate del azar o de un sentir espontáneo.
En este caso hablaremos de don Andrés Francia Villajos, de Porzuna, Ciudad Real.
Tras 38 años “con la tiza” en las manos, se jubila. Cuando digo “con la tiza” utilizo deliberadamente una expresión muy del gremio pero que no debe ocultar hechos como que don Andrés ha sido, durante toda su vida, un maestro inquieto, innovador, buscador de “lo último” sin olvidar lo de toda la vida. Ha estado siempre al día de las llamadas Tecnologías de la Información y la Comunicación, además de manejar con soltura medios como la fotografía,  el vídeo, la televisión o la radio.
La suya ha sido una carrera docente volcada en la escuela y en su alumnado, buscando siempre la mejora si escatimar esfuerzos.
Cuando lo conocí, en lo que él llama con humor, la “República Independiente de El Calvario” –unas aulas situadas a cierta distancia del centro escolar-, el Colegio Público de Integración “Ntra Sra del Rosario” de Porzuna, yo estaba empezando y él representaba y representó para mí la experiencia sin el hollín del quemado, el deseo de seguir innovando, la buena disposición para aprender y, además,  para emprender los proyectos que yo tenía en mente.
En aquellos años don Andrés ya era, en sus ratos libres, investigador histórico y Cronista Oficial de la Villa de Porzuna, buscando siempre la forma de trasmitir sus conocimientos y sus hallazgos a su alumnado y a sus paisanos. Ya había sido alcalde de su pueblo  -recorriendo a diario más de 230 kilómetros diarios- para seguir ejerciendo la docencia en el hermoso pueblo de San Carlos del Valle y poder administrar la vida municipal.
Por aquellos años este maestro de escuela ya había ganado varios concursos nacionales y había viajado con grupos de alumnos a Alemania e Italia, publicaba sus artículos en la prensa provincial y local, colaboraba con numerosas asociaciones e iniciativas de su municipio y seguía aportando una parte muy importante de su tiempo y de su trabajo al colegio. Por ejemplo, en aquellos años organizó varias actividades extraescolares, que tenían lugar dos o tres días semanales por la tarde, después de las clases, y algunos sábados por la mañana.
Cierto es que el colegio de Porzuna era, y creo no exagerar, uno de los punteros de Castilla-La Mancha, con su director, Lorenzo Prado Cárdenas, a la cabeza. Había, como se puede imaginar, un buen equipo que trabajaba mucho y con ilusión.
Andrés estudiaba alemán, le encantaba lo que entonces llamábamos Informática, la Arqueología –fue uno de los descubridores de algunos importantes yacimientos-, la Historia, la Etnografía, la Fotografía y un listado muy largo. Y en el aula seguía innovando. Recuerdo su pasión y sus grandes esfuerzos en cuestiones como la mejora de la velocidad lectora o su compromiso con el Medio Ambiente y su apoyo incondicional a los proyectos que inicié o en los que participé. Aquel curso el alumnado del colegio ganó el primer premio nacional del concurso organizado por SECEM y el Parque Nacional de Doñana sobre el lince ibérico (“El lince ibérico, en el punto de mira de la conservación”) gracias al trabajo en equipo pero muy especialmente a su apoyo.
Andrés trabajó muy de cerca el rico Patrimonio material e inmaterial de su municipio en diferentes ámbitos. Lo recuerdo totalmente volcado con las fiestas y tradiciones populares, escribiendo y maquetando las revistillas de algunas romerías, recopilando información y entrevistando a gente mayor, buscando siempre en archivos históricos, haciendo fotos,…y todo le parecía y le sigue pareciendo poco.
Iniciamos, por ejemplo, la recogida de fotografías antiguas y la creación de un Archivo de Fotohistoria escolar. En pocos meses organizó una extraordinaria exposición, a la que sucederían otras muchas así como la publicación de dos libros.
Pero don Andrés era mucho más que eso. Era la típica persona infatigable, dispuesta a darlo todo por su alumnado, por sus compañeras y compañeras y por su querido pueblo de Porzuna.
Don Andrés fue un buen maestro de escuela, muy comprometido y entregado desde la sencillez y la generosidad. Fue, para mí, un maestro, en el mejor y más profundo sentido del término. Y lo mejor de todo, es que sigue en la brecha, con tantos o más proyectos como antes. Sigue, por ejemplo, echando una mano a las compañeras que se lo solicitan. Sigue investigando, aprendiendo, colaborando, con su ilusión intacta e incombustible.
Y al hablar así de un compañero de trabajo con el que tanto aprendí, como decía en el título, en realidad lo que quiero es honrar a tantas maestras y tantos maestros que he tenido la suerte de conocer a lo largo de mis veintipico años de experiencia que en nada se parecen a los tópicos que oigo por ahí, en la tele, en la radio, en la prensa y hasta en la tienda cuando espero mi turno.
Recuerdo a Bienve, a Miguel, a Matilde, a Julia, a María Dolores, a Mari Carmen, a Encarni y a otros muchos y muchas y compruebo como nuestra sociedad ha elaborado, sin quererlo, un discurso nocivo y falso, que se aleja de la realidad y que no reconoce la figura clave del maestro, del profesorado en realidad, imprescindible para entender  nuestro impresionante avance social y cultural, mal que les pese a algunos generadores de opinión. ¡Muchas gracias de corazón, profesoras y profesores! ¡Muchas gracias, don Andrés!
Así que, personalizando en la figura de un buen maestro de escuela como don Andrés Francia Villajos, vaya mi agradecimiento y mi reconocimiento a todos los docentes por su importantísima labor, por las dificultades que atraviesan y por el no siempre bien comprendido esfuerzo que realizan.


Nuevos avistamientos de meloncillos (Herpestes ichneumon) en la provincia de Ciudad Real.

Desde hace ya unos años se vienen observando meloncillos (Herpestes ichneumon) en diferentes municipios de Ciudad Real. Todo parece indicar que se está produciendo una expansión de esta especie de mangosta de origen africano. Hasta hace unos años se tenía constancia de su presencia y, de hecho, en el Atlas y Libro Rojo de los Mamíferos de España, aparecía citado en la mitad sur de la provincia así como en el extremo oeste.
Así, en pocos años, el meloncillo ha sido visto, entre otros, en los municipios de Ciudad Real, Porzuna , Piedrabuena y Puertollano en varias ocasiones. La vez más sonada fue la del ejemplar de hembra que apareció en el archivo del Hospital de Ciudad Real en 2014. Se han producido además hallazgos de ejemplares atropellados. Más famoso ha sido el avistamiento de un ejemplar cerca muy cerca de Madrid.
Recientemente se han vuelto a observar meloncillos por diferentes vecinos en el término municipal de Piedrabuena.
Los meloncillos fueron introducidos en la península Ibérica en el siglo VII antes de Cristo y habrían ocupado el cuadrante suroccidental, según la bibliografía especializada.
Recientemente se ha sabido que algunos colectivos están alertando de su aparente excesiva proliferación y solicitando que se tomen medidas. Así, en la comarca toledana de Torrijos en mayo de 2016, alertaban de la superpoblación de este mamífero carnívoro, que estaría poniendo en peligro a otras especies cinegéticas y no cinegéticas, según informó M.Vega, en el diario ABC el 25 de mayo del año pasado.
Para algunos ecologistas, como Santiago Martín Barajas, se trataría de un fenómeno íntimamente relacionado con el cambio climático y el calentamiento global. Así lo expuso en la revista El Ecologista, en el número 88.
Sin embargo, conocemos avistamientos anteriores a las fechas manejadas en el anteriormente citado trabajo en la provincia de Ciudad Real.  Además, se trata de un animal que no es fácil de observar y del que ya se advertía hace muchos años en la emblemática obra de Félix Rodríguez de la Fuente, Fauna Ibérica, de como estaba muy extendida la creencia de la existencia de grandes serpientes con pelo en España debido a la costumbre de los meloncillos de caminar en fila normalmente en zonas con vegetación. Esas curiosas observaciones las hemos recopilado en pueblos como Villarrubia de los Ojos, a finales de los años setenta del siglo XX y en Anchuras, en los primeros años noventa.
En la "Fauna Ibérica" de Ángel Cabrera Latorre de 1914 se hablaba de la distribución de finales del siglo XIX. En 1877 se podía encontrar en prácticamente todo el territorio peninsular, incluyendo Galicia. Sin embargo, el autor afirmaba que por esas fechas ya solo se localizaba por el “distrito Bético”, Andalucía y la provincia de Badajoz, además de Portugal. Se consideraba la localidad típica Sierra Morena.

Lo cierto es que de un tiempo a esta parte se han venido produciendo avistamientos, capturas y atropellos de meloncillos en la provincia de Ciudad Real.

Francisco Zamora Soria.


En la fotografía, con valor documental exclusivamente, un meloncillo en Piedrabuena, Ciudad Real. Foto de Francisco Zamora Soria.

lunes, 26 de septiembre de 2016

Entrevista escrita íntegra de César Muñoz Guerrero a Francisco Zamora Soria...

Hace unos días el estudiante de Periodismo César Muñoz Guerrero me hizo unas preguntas por escrito para agilizar la entrevista que quería realizar y publicar con motivo de la presentación del libro "Catálogo de las pegatinas ecologistas de la provincia de Ciudad Real". La entrevista fue publicada en los diarios digitales MiCiudadReal y El Crisol de Ciudad Real. Dada la escasez de espacio, la parte escrita fue muy resumida para poder ser publicada. A continuación aparece la entrevista escrita íntegra:




 Principios del ecologismo provincial: conflicto o suceso detonante, respuesta de los activistas y reacción social


Yo creo que falta trabajo por hacer, mucho trabajo, de búsqueda de información, de reflexión y síntesis sobre el origen y los primeros años del llamado ecologismo a nivel mundial, nacional y provincial. De entrada hay una "partida de nacimiento" más o menos oficial, que habla de Rachel Carson y su "Primavera silenciosa" aunque la inmensa mayoría de la gente ni lo leyó ni sabe que existe pero se considera que fue 1962 el año de nacimiento del llamado "ecologismo". Para Ciudad Real lo primero que habría que decir es que no se debería hablar de "ecologismo provincial" en puridad...pero en general, aunque siempre hubo personas con más sensibilidad ambiental que la media y conocemos casos concretos de algo parecido al ecologismo de hace siglos y, por supuesto, de todo el siglo XX serían los primeros años setenta cuando empiezan a surgir grupos en España y, el primero, con dudas sobre su identificación con respecto a un grupo ecologista, sería ADREDA, de Daimiel.
Parece que efectivamente surgieron los grupos (con diversidad de denominaciones y tipos de estructura) mayoritariamente como consecuencia de conflictos concretos como el del Campo de Tiro de Cabañeros. Hubo algo o mucho de reacción tipo "NYMBY" ..."no en el jardín de mi casa" del mundo anglosajón pero también había y hay personas con sensibilidades diferentes y con la llamada "inteligencia naturalista" de Gardner...
Desde luego la huella de Félix Rodríguez de la Fuente estuvo y, de alguna manera, sigue estando. Y entre medias había un poco de todo, curiosos, oportunistas, políticos, despistados, enterados, preocupados por sus temas particulares, gente generosa y muy empática...de todo...pero poca gente, en general...

- Años de esplendor: ¿los hubo?, período (entre qué años), contexto sociopolítico, algún gran triunfo

Supongo que los primeros de Cabañeros, "los ochenta y tantos" pero yo no los viví directamente sino en un segundo o tercer plano. Triunfos hubo pero los tantos se los apuntó fundamentalmente José Bono y, de forma difusa, la sociedad...Los grupos ecologistas tenían, a mi juicio, mucho de anarquistas profundos, de "coroneles aurelianos buendías" con sus pececillos de oro...nunca supieron rentabilizar sus éxitos o hacerlos valer...Eso les (o nos) honra...


- Años de decadencia: período, causas, algún fracaso absoluto

Decadencia es término fuerte, desaceleración, cansancio, agotamiento...retirada, intermitencia, conflictos internos o personales, choque de intereses o de posicionamientos, casi a diario...y quizás, lo más preocupante, falta o cierta falta de relevo generacional...quizás porque la sociedad está cambiando...pero no me considero autorizado por mi alejamiento para opinar de este tema...


...el ecologismo provincial empezó con Cabañeros, pero se trata de explicarlo brevemente para exponerlo al público...

Cabañeros fue una "explosión" o eclosión que yo no viví. Estaba en Madrid y leía algo y me contaban algunos amigos...Ya había grupillos de gente con inquietudes muy enfocadas al medio natural, en general que solían mezclar también con cuestiones de todo tipo como el pacifismo, el antimilitarismo (quizás fuese solo anti servicio militar, habría que verlo con detenimiento), la insumisión, con el patrimonio, la arqueología, lo que se decía "cultura" como comodín... De cualquier manera yo soy solo una pequeña pieza de ese rompecabezas complejo de medio millón de habitantes.



martes, 20 de septiembre de 2016

Próximamente se presentará el tercer libro sobre la Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real.

La Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real a través de las pegatinas.
FZS, junio 2016.
Próximamente se presentará el tercer libro sobre la Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real. En esta ocasión se trata del “Catálogo de pegatinas ecologistas de la provincia de Ciudad Real” del que es autor Francisco Zamora Soria.
Se han recopilado y documentado las pegatinas de tema ecologista, conservacionista y de educación ambiental que se han generado en los últimos treinta años. En total el catálogo consta de 85 pegatinas de temas como la lucha contra el campo de tiro de Cabañeros, el campo de tiro de Anchuras, la protección de espacios como los humedales manchegos, el río Bullaque o el Valle de Alcudia.
Hay pegatinas editadas por grupos ecologistas y por diferentes  instituciones públicas. En cuanto a la autoría, se cuenta con obras de artistas de reconocido prestigio que colaboraron de forma altruista en determinados conflictos así como con otras realizadas anónimamente o por dibujantes, diseñadores y fotógrafos de la provincia de Ciudad Real.
El trabajo persigue varios objetivos como el de continuar trabajando en la muy interesante e importante historia del movimiento ecologista provincial, de la que ya se han publicado dos libros más. Se trata también de hacerlo de forma totalmente independiente, sin subvenciones o patrocinio alguno y de generar materiales que tengan potencial educativo y didáctico lo más objetivo posible.
Las pegatinas, así, son una parte de nuestro patrimonio y de nuestra historia y se convierten en texto y pretexto que trasciende el valor puramente material.
Las pegatinas que hoy conocemos tienen su origen lejano en las llamadas “calcomanías” (del francés décalcomanie), inventadas en Londres en 1750 por el litógrafo francés Simon François Ravenet. La técnica se popularizó en la década de los setenta del siglo XIX con la moda de la cerámica decorada. A partir de los años treinta del siglo XX recibió un nuevo impulso de manos de algunos autores surrealistas como Óscar Domínguez (1906-1957) o Marx Ernst (1891-1976). Lo que posibilitó la existencia de la pegatina como hoy la conocemos se debió al empresario de Kansas que en 1946 la inventó, al fabricar un papel autoadhesivo.

Las pegatinas de tema ecologista se siguen utilizando pero, en general, nos encontramos ante nuevas formas de expresión. El autor es Francisco Zamora Soria, maestro de Educación Primaria, geógrafo y ecologista a título individual.
El libro se presentará el día 30 de septiembre de 2016 a las 8:30 en “El Canguro Violeta” de Piedrabuena, junto con una exposición de las pegatinas ecologistas recopiladas.


Contacto: Paco Zamora Soria. Franzaso45@gmail.com


martes, 19 de julio de 2016

Nota de Prensa: "Los Ojuelos del río Gigüela siguen manteniendo agua, a pesar de la intensa campaña de riegos."

Nota de Prensa:
"Los Ojuelos del río Gigüela siguen manteniendo agua, a pesar de la intensa campaña de riegos."

Los ojuelos del río Gigüela, en Villarrubia de los Ojos, son afloramientos de aguas subterráneas que, tras décadas, volvieron a manar hace ahora unos meses. Los ojuelos se encuentran en el paleocauce del río que, tras ser encauzado en los años sesenta y primeros setenta del siglo XX, dejó de funcionar hidrogeológicamente como lo había hecho en el pasado.
Los afloramientos de agua actuales, unos treinta, son mayoritariamente antiguas zanjas y pozas, además de alguno a flor de tierra. De estos, algunos conservan agua, a pesar de haber empezado la intensa campaña de riegos.
Los niveles freáticos habían descendido unos 20 centímetros hace ya un mes y mediio y es presumible que siga esta tendencia en los meses veraniegos. Según fuentes consultadas, se espera un descenso piezométrico de un metro y medio para el final del verano, como ha ocurrido en los últimos años.
Por otra parte, todo parece indicar que los mencionados ojuelos ya tuvieron agua en los años pasados, aunque no se detectara su presencia.
Es muy significativa e importante la evolución de la vegetación hidrófila en enclaves que, además, presentan una gran diversidad geomorfológica, con formaciones dunares y yesares, por un lado, así como por los altos valores fitogeográficos que atesora, por otro, a pesar de las visibles amenazas existentes.
Desde los ámbitos ecologistas y científicos se sigue trabajando en el estudio, conservación y divulgación de los altos valores naturales, paisajísticos y culturales de esta zona.

Fotografía de José Manuel Hernández.


Publicada la Nota de Prensa. A-B-

lunes, 16 de mayo de 2016

Unas treinta personas asistieron a la presentación del segundo libro sobre la Historia del Ecologismo en Ciudad Real.

El pasado sábado, 14 de mayo de 2016, a las 11 de la mañana, fue presentado el segundo libro sobre la Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real. Al acto, que tuvo lugar debajo del puente de Zuacorta, asistieron unas treinta personas. 
En la presentación intervinieron cinco de los seis autores, que hablaron sobre sus trabajos y sus vivencias. El coordinador de la obra, Francisco Zamora Soria, presentó a los autores Rafael Galán de la Flor, Rafael Ubaldo Gosálvez Rey, Miguel Alhambra Delgado y José María Oñate Díaz. No pudo asistir Gregorio López Sanz.
Durante la exposición de los autores se produjeron algunas preguntas y breves intervenciones de alguno de los asistentes.
El sitio elegido ya fue el escenario de la presentación de la primera entrega, en 2008, por tratarse de un lugar emblemático ya que era el primer puente que cruzaba el río Guadiana tras su nacimiento, en los Ojos del Guadiana. Allí se encontraba la turba ardiendo y el puente de piedra totalmente inutilizado, dada la desaparición del agua a mediados de los años ochenta del siglo XX.
Hoy, casi ocho años después, se puede observar un charcón que ha mantenido el agua durante los últimos tres años.
Merece la pena recordar que tanto el primer libro como el segundo no han contado con subvención alguna. El primero fue posible gracias a la generosidad del profesor universitario, el catedrático doctor don Lorenzo Sánchez López.
En esta ocasión se ha contado con la colaboración desinteresada del fotógrafo Manuel Ruiz Toribio, que facilitó muy interesantes fotografías de finales de los años ochenta y posteriores de su archivo personal.

Una de las ideas iniciales que animaron esta iniciativa era la de contar con diferentes autores, de diferentes disciplinas, puntos de vista o vivencias que posibilitaran el encuentro, el diálogo y la reflexión sobre temas de interés comunes. Así, en el primer tomo se pidió la colaboración a 230 personas, de las que participaron 12. En esta ocasión se pidió la colaboración a unas 30 personas de las que aceptaron cinco, más la aportación del coordinador.

En la presentación se distribuyó gratuitamente el libro y CD "Educación geográfica a través de los paisajes de la provincia de Ciudad Real".

La idea es realizar algunas presentaciones más, que se encuentran en fase de organización.




Fotografías de Enrique Soria López.






jueves, 5 de mayo de 2016

Nota de Prensa: Se presentará la segunda parte de la Historia del Ecologismo en Ciudad Real debajo de un puente.

Nota de Prensa:
Se presentará la segunda parte de la Historia del Ecologismo en Ciudad Real debajo de un puente.
La semana próxima se presentará la segunda parte de la Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real. El acto tendrá lugar debajo de un puente, concretamente en Zuacorta, el primer puente que cruzaba el río Guadiana tras su nacimiento.
Se trata de una iniciativa de autoedición, que no cuenta con subvención alguna, como en la primera entrega, en 2008. En esta ocasión han participado seis autores de ámbitos como la Sociología, la Economía, la Geografía, el sindicalismo agrario o las experiencias vividas en conflictos ambientales provinciales.
Los autores son Miguel Alhambra Delgado, Rafael Galán de la Flor, Rafael Ubaldo Gosálvez Rey, Gregorio López Sanz, José María Oñate Díaz y Francisco Zamora Soria, este último también ha llevado a cabo la coordinación. Algunos autores son profesores, dos doctores y un doctorando concretamente- de la Universidad de Castilla-La Mancha y de la Universidad Complutense de Madrid. Alguno ya participó en la edición anterior.  Además se ha podido contar con las fotografías de Manuel Ruiz Toribio. La editorial es ArtGerust, dedicada entre otros trabajos, a la autoedición.
La temática se centra en dos bloques, los conflictos en torno al agua en la llanura manchega y en las lagunas volcánicas del Campo de Calatrava y la lucha contra el Campo de Tiro de Anchuras.

El hecho de volver a presentar el segundo libro debajo del puente de Zuacorta responde a un intento de llamar la atención sobre el penoso estado del río, a pesar de la mejora considerable experimentada en los últimos años. Es importante recordar que cuando se presentó el primer libro, en 2008, el incendio de la turbera del cauce del Guadiana, que llevaba casi 25 años quemándose, había alcanzado el subsuelo del Parque Nacional y las máquinas excavadoras trabajaban para intentar apagarlo. Hoy, desde el mismo puente, se observa el agua que aflora y que supone un signo de esperanza.

FZS, mayo 2016.




Presentación del primer libro de Historia del Ecologismo en  octubre de 2008. Fotografía de Antonio Turrillo Martín.



domingo, 1 de mayo de 2016

Contradictoria política de reestructuración del viñedo en Castilla-La Mancha.

Desde hace ya varios años la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha viene subvencionando la reestructuración del viñedo. Dependiendo de varias características de los peticionarios se concede más o menos dinero. Esas características han tenido y tienen una carga muy importante de subjetividad y de beneficio/perjuicios para determinados propietarios y propietarias. No parece que se hable del tema en los llamados medios de comunicación social, salvo que se trate de las peticiones o, en realidad, exigencias, de los agricultores que copan los sindicatos/patronal.

Las prelaciones establecidas ¿por la autoridad? son muy cuestionables desde todos los puntos de vista y, desde luego, desde el más elemental e importante, ese que se centra en lo que se entiende por Igualdad o, más sencillo todavía, Justicia. No concuerdan tampoco esas categorías preferentes con criterios serios que busquen la fijación de la población, la generación de empleo legal y en condiciones dignas de trabajo y de remuneración, el pago de impuestos, el respeto al Medio Ambiente y al Patrimonio.

Llama la atención que con fondos europeos y una supuesta "eco-condicionalidad" se puedan estar llevando a cabo transformaciones/destrucciones tan significativas sin que parezca siquiera que algo están cambiando, aunque solo fuera el paisaje, que ya es mucho.
Hace unos meses, por ejemplo, trascendió a la opinión pública que se planteaba el arranque de los cultivos en espaldera en las Zepa...y la devolución de las subvenciones. No se ha vuelto a oír hablar , que podría significar que se quedó en un simple toque de atención verbal sin más consecuencias. Desde luego fue tema de conversación y de discusión y, como suele ser habitual, se echaron en falta las aclaraciones pertinentes de políticos de todos los partidos, de sindicatos/patronal y de técnicos y/o expertos.

Pero lo más sorprendente es que se esté produciendo una intensificación agrícola sin precedentes, con una parte muy importante de dinero público dado precisamente, en general, a los que menos lo necesitan, que generará más excedentes (¿recordamos lo ocurrido hace unos años en los que hubo que paralizar la vendimia y la elaboración de caldos incluso en algunas de las cooperativas más grandes de Castilla-La Mancha porque no había dónde almacenar semejante cosecha?). Por otra parte, ¿se ha tenido en cuenta el fuerte impacto de los nuevos cultivos en espaldera en las extracciones de aguas subterráneas? 
Hasta ahora en Ciudad Real se plantaban mil quinientas (1.500) viñas por hectárea. Ahora, se proyectan, se aprueban y se subvencionan dos mil doscientas veintidós (2.222) viñas por hectárea. Se trata de un tercio más que, sin tener en cuenta las mayores necesidades de agua del cultivo en espaldera, supondrán, de entrada, un incremento del treinta por ciento en el consumo de agua.

Contrastan estos datos con los discursos, con las promesas, con los programas, con toda la maquinaria de creación de opinión y posicionamientos. Desde luego sorprende el silencio frente a la abundancia de  noticias de todo tipo y a polémicas con temas de mucha menor trascendencia. 
Todo está relacionado, llevamos aprendiendo desde hace ya muchos años. Nada es porque sí. Detrás están los grupos de presión...constituidos por personas con nombres y apellidos. Detrás está la pugna partidista de hace ya cuarenta años. Como está la lucha por el agua del Tajo, uno de los trasvases, y por el poder, puro y duro, por esa concepción del "quítate tú que me pongo yo". Detrás están los creadores de opinión y los silenciadores de la misma. Y, ¿cómo no? las personas. Esas que sufren las consecuencias en sus propias carnes. De las que, por cierto, tampoco se suele hablar. Y detrás están también, como víctimas, las lindes, la vegetación, la fauna, los arroyos, las quinterías, las albercas, las regueras, los sendones, los caminos, los majanos, los chozos, los bombos, los pozos de noria, los silos, los hitos, el paisaje en una palabra, y sus potencialidades. 
Hace unos años, en 2007, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, entonces presidida por el doctor en Historia Contemporánea don José María de la Barreda Fontes, se gastó una cantidad muy importante de dinero contratando a un grupo de expertos universitarios estadounidenses de Harvard para que estudiaran nuestra comunidad autónoma y los riesgos y potencialidades ambientales. La conclusión se difundió como si se hubiera descubierto la piedra filosofal. "Si el paisaje va mal, todo va mal", dijeron. 
Y todo está relacionado. El agua que aflora en los Ojos y en el cauce del río Guadiana y la que aparece en los Ojuelos del Gigüela están relacionadas con esas curiosas y contradictorias políticas que están reforzando a determinados grupos sociales en detrimento de la mayoría y del medio natural.
Ahora volvemos a tener campaña electoral, tras seis meses casi de interinidad de un gobierno y de incapacidad de los nuevos políticos electos para formar uno nuevo. Se hablará de lo divino y lo humano pero, contradictoriamente, se hará para no decir nada concreto, para no comprometerse, apara no perder potenciales votos, para no abrir nuevos frentes...Y seguiremos viendo como se destruyen la Naturaleza y el Patrimonio y como algunos, muy pocos, obtienen los grandes beneficios que se niegan a la sociedad en su conjunto. Cuando se habla de recortes sería importante tener en cuenta que hay colectivos a los que no se les ha recortado nada, precisamente a los que menos falta les hace.





lunes, 25 de abril de 2016

Nota de Prensa: Brevemente se publicará la segunda entrega de la Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real.

Brevemente se publicará la segunda entrega de la Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real.
El año 2008 vio la luz un libro sobre la Historia del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real: ”En primera persona: Apuntes para unaHistoria necesaria del Ecologismo en la provincia de Ciudad Real”. En breve se publicará la segunda entrega que, en esta ocasión, ha contado con las aportaciones de seis autores de ámbitos diferentes y sobre dos temáticas: los conflictos y vivencias en torno al agua en la llanura manchega y las lagunas volcánicas del Campo de Calatrava por un lado y el campo de tiro de Anchuras y la lucha contra su instalación, por otro.
Como en la primera ocasión, se ha intentado contar con todo tipo de testimonios, protagonistas, estudiosos y disciplinas para ofrecer una visión lo más abierta, dialogante y rica posible. E igualmente se ha tratado de una iniciativa que no ha contado con subvención alguna, buscando la máxima independencia y objetividad.
Para el tema del agua han aportado sus trabajos un sociólogo, un economista y un agricultor. Además, un geógrafo nos ofrece una síntesis de sus investigaciones sobre los numerosos cráteres ocupados por agua en la antiguamente llamada “región volcánica central de España”.
La lucha contra la instalación de un campo de tiro del ejército del Aire en el pequeño y alejado municipio de Anchuras es relatada, en primera persona, por uno de los más activos agentes de los tres primeros años, el que entonces fuera sacerdote de la población.  Además se incluye la visión de un maestro de escuela que estuvo tres años en ese hermoso y combativo pueblo.
Los autores son:
ALHAMBRA DELGADO, Miguel;
GOSÁLVEZ REY, Rafael Ubaldo;
LÓPEZ SANZ, Gregorio;
OÑATE DÍAZ, José María;
GALÁN DE LA FLOR, Rafael;
ZAMORA SORIA, Francisco.
La coordinación corrió a cargo de Francisco Zamora Soria. Algunas fotografías han sido facilitadas por el fotógrafo Manuel RUIZ TORIBIO.

La presentación tendrá lugar en algún lugar emblemático de la Conservación/destrucción de la Naturaleza en la provincia, como el río Guadiana o los Ojuelos del río Gigüela, en Villarrubia de los Ojos.


viernes, 8 de abril de 2016

Y el agua sigue subiendo en los Ojuelos.

Ya ha llegado el mes de abril. Aunque no se ha generalizado, la campaña de riego ya ha empezado. Las lluvias del inicio de la semana vinieron muy bien pero no han cambiado significativamente el balance de año escaso en precipitaciones.
Sin embargo, como ya sabemos, el Acuífero 23 tiene un funcionamiento que no se corresponde con las precipitaciones "directamente" sino que "discurre" mucho más lentamente. 
Los niveles piezométricos de marzo de 2016 han vuelto a subir. Y un simple vistazo es suficiente para comprobarlo in situ.
Así, hoy, 8 de abril de 2016, el nivel del agua en algunos afloramientos es mayor que el de hace un par de semanas.
El charquito de apenas unos centímetros se ha convertido ya en otro de más de dos metros por metro y medio. La vegetación acuática empieza a crecer y los anfibios aparecen muy activos en esos reductos de agua.
Siguen las transformaciones agrícolas y el proceso de intensificación de los cultivos parece que no ha hecho más que empezar. Contrasta la realidad que se percibe desde las carreteras y caminos con los discursos, las promesas, los llamados programas electorales y hasta los artículos falaces de una consejera de Castilla-La Mancha en el Diario Lanza hablando sobre el trasvase Tajo-Segura.








domingo, 28 de febrero de 2016

Sobre "La Ribera" de Víctor Díaz Núñez de Arenas.

"La Ribera"  del Víctor Díaz Núñez de Arenas es algo más que un libro de fotografías. Si solo fuera eso, un libro de fotografías sobre la ribera del río Guadiana, ya sería importante. Pero es, por ejemplo, una forma de ver la Naturaleza con delicadeza, con mucha atención, con sentimiento, buscando transmitir la grandeza de lo pequeño y lo tantas veces desapercibido.
Además, La Ribera es un canto poético a un espacio natural que lleva muchos años en una situación difícil. Es también una apuesta por el micromecenazgo y la creación artística. Y, por supuesto, una delicia, un remanso de paz hecho con calma.

sábado, 27 de febrero de 2016

Sigue la destrucción en los Ojuelos del río Gigüela.

Sigue la destrucción en los Ojuelos del río Gigüela. Se podría decir que inexplicablemente pero parece ser que es normal que se siga extrayendo arena de una zona de dunas con endemismos animales y vegetales protegidos y de gran interés. Parece que es normal que se trabaje los sábados y domingos desde el amanecer hasta bien entrada la noche. Se dice que los inspectores de Trabajo y de Hacienda no trabajan los fines de semana. Parece ser que los sindicatos, tampoco.
Normal debe ser que se almacenen materiales que producen lixiviados contaminantes en zonas de gran porosidad. Y lo más normal del mundo es que todo esto ocurre a diario desde hace meses a escasos cientos de metros de un Parque Nacional, Reserva de la Biosfera, Lugar de Importancia Comunitaria, Zona de Especial Protección para las Aves, Humedal de la lista Ramsar...
Se dice que las denuncias se suceden pero lo que se suceden son los trabajos con fuertes impactos. Se preguntan algunas personas a quién corresponde poner orden, ¿al SEPRONA? ¿a los agentes medioambientales de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha?¿a la guardería del Parque Nacional? ¿a los guardas de la Comisaría de Aguas?¿a la guardería Rural del Ayuntamiento de Villarrubia de los Ojos?
Lo más cómodo, como tantas veces, es responsabilizar a los ecologistas, que no hacen nada y, además, hay quiénes dicen que están comprados.
Las máquinas excavadoras han llegado a uno de los pequeños montecillos, quizás el más hermoso y el que mantiene una vegetación extraordinaria. Allí hay encinas impresionantes que nos recuerdan lo que fue este territorio hace unas décadas. Pero, pensándolo fríamente, ¿qué más dan unas encinas más que menos? ¿Es que estamos en contra del progreso? ¿Es que no queremos el desarrollo?¿Qué es más importante, un chaparro o una familia? ¿Y qué pasa porque se aprovechen esos metros cúbicos de arena y se "mejore" el suelo con buena tierra? ¿No es mejor plantar almendros en espaldera con riego?










Ya se conoce el informe del IGME sobre los Ojuelos del Gigüela.

Hace unos días se distribuyó de forma oficiosa el informe del IGME de Miguel Megías y Pozo. Es de agradecer el interés tomado por este evento hidrogeológico y geográfico y el trabajo realizado. El informe presenta abundante información e ilustraciones, fundamentalmente mapas geológicos. 
Como ya se expresaba en una entrada anterior, el estudio se basa en unos cuatro o cinco afloramientos detectados a finales de diciembre de 2015 y primeros de enero de 2016, sin que se hayan tenido en cuenta otros muchos aparecidos o descubiertos con posterioridad.
Tampoco se han manejado datos de los piezómetros disponibles y se incurre en algunos errores en este tema.
Cuando se describen los afloramientos no se enfatiza tanto en el concepto de "reperforación" de los ojuelos como se hacía en el titular de La Tribuna el 11 de febrero de 2016, casi desvirtuando y descalificando las noticias aparecidas anteriormente. En realidad se describe someramente lo  que se cree que pudo haber ocurrido, como parecería lógico en un trabajo que persigue la objetividad.


miércoles, 17 de febrero de 2016

Nuevos afloramientos en Los Chorreros.

Hoy, 17 de febrero de 2016, han sido localizados nuevos afloramientos en Los Chorreros. El agua, a simple vista, se encuentra a unos dos metros y medio de profundidad. Todo parece indicar que hay algunos puntos más con agua. 
Como se viene constatando en algunos puntos de estos terrenos, se pueden ver escombros y basuras incluso en los arroyos, pozas y zanjas.



Tablas de Daimiel publica el número 1 de su revista.

Tablasdedaimiel.com acaba de publicar su revista, el número 1. Se puede leer a texto completo, y descargar, en el enlace. El tema de los Ojuelos es uno de los más importantes de esta entrega.

martes, 16 de febrero de 2016

Propuesta del Ayuntamiento de Villarrubia de los Ojos para la protección de los Ojuelos del río Gigüela.

El pasado sábado se hizo pública la noticia, a través de una nota de prensa de la Asociación Ecologista Anea, que el Ayuntamiento de Villarruba de los Ojos, Ciudad Real, habría solicitado a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha la declaración de micro-reserva de Los Ojuelos de Villarrubia de los Ojos, junto con las Pozas de los Alpargateros. 
De entrada y sin contar con más información que la dicha, parece una buena idea y una demostración de la buena disposición de la alcaldesa del municipio y de su equipo de gobierno. 
No parece, sin embargo, que se trate de espacios que cuenten ni con la continuidad territorial aconsejable ni con unos valores naturales  semejantes, por lo que parecería más lógico que se optara por la individualización de cada uno. Por otra parte, su historia, su génesis, su evolución, sus características...son muy diferentes, aunque puedan compartir la cercanía y el hallarse enclavados en el cauce del río Gigüela. Además, las microrreservas deben tener una extensión inferior a las 20 hectáreas, de manera que se quedarían fuera demasiadas hectáreas en el caso de optarse por una sola microrreserva.



lunes, 15 de febrero de 2016

El agua mana a flor de tierra en los Ojuelos del río Gigüela, en Villarrubia de los Ojos, Ciudad Real.

El agua mana a flor de tierra en Los Ojuelos del río Gigüela, en Villarrubia de los Ojos.
Francisco Zamora Soria, 9 de febrero de 2016.
Hace apenas un mes y medio desde  que Conce Sepúlveda, guía de campo de Villarrubia de los Ojos, descubrió un pequeño afloramiento de agua en una antigua zanja, en el paraje conocido como Los Ojuelos. El nivel del agua ha ido subiendo y se han detectado nuevos afloramientos en varias pozas y en antiguos pozos de noria.
Se trataba de antiguas pozas de escasa profundidad y de zanjas que, junto con los pozos, suman un total de veinticuatro puntos de agua, en ambas márgenes del río. En algunos casos se trata de aguas ligadas al río Gigüela mientras que en otros, todo parece indicar que sería el acuífero 23 el que está empezando a aflorar, a pesar de haber sido un año tan escaso en precipitaciones.
Los puntos con agua se encuentran en el paleocauce del río Gigüela, una zona muy llana, con una altitud de 610 metros sobre el nivel del mar. Aquel río trenzado, con diferentes cauces o madres entre las que destacaba la Madre Chica, fue encauzado definitivamente (por el momento) a finales de los años sesenta y primeros setenta del siglo XX. De los varios miles de metros de anchura, se dejó un canal de unos veinte metros con las riberas peraltadas y la Madre Chica, también encauzada y modificado su trayecto.
Ahora, el agua ha aflorado en una pequeña zona deprimida en torno a los 609 metros snm. Puesto que en los últimos días ha llovido, aunque muy poco, es recomendable esperar para comprobar cómo se comporta el pequeño manantial. Desde luego se trataría de una gran noticia si se confirmara en los próximos días que es agua del nivel del acuífero que empieza a alcanzar esa cota. Inicialmente se detectó apenas un charco con unos dos o tres centímetros de profundidad en una zona ligeramente deprimida. Al día siguiente ya se trataba de unos cuatro centímetros de profundidad y unos treinta centímetros, el lado más largo. A fecha de hoy, 14 de febrero de 2016, el afloramiento de agua tiene una profundidad de unos ocho centímetros y dobla la de los pasados días.

No parece que el pequeño charco esté relacionado con las lluvias de estos días sino más bien con la subida de los niveles de las aguas subterráneas que se están produciendo.


Afloramiento de unos cuatro centímetros de profundidad y unos 30 centímetros de largo por veinte de ancho, el día 9 de febrero de 2016. Fotografía de Francisco Zamora Soria.


Afloramiento el día 14 de febrero de 2016, con una extensión y profundidad del doble de la del día 10.

sábado, 13 de febrero de 2016

Noticia sobre los Ojuelos del río Gigüela del IGME en La Tribuna.

El jueves 11 de febrero de 2016 el diario  La Tribuna de Ciudad Real publicó un artículo titulado "El IGME confirma que los "ojos" del cauce del Gigüela han sido "reperforados artificialmente" de A. Criado. La misma noticia aparece en la edición digital.
Los datos aportados por el jefe de área de Hidrogeología Aplicada del Departamento de Investigación y Prospectiva Geocientífica del IGME, Miguel Megías siendo interesantes, resultan escasos y no parecen haber sido actualizados con el afloramiento de más puntos de agua. Tampoco hay una verdadera correlación entre el titular y el cuerpo del artículo. Así, no queda claro a qué se refiere exactamente ese concepto de "reperforación artificial". Es de suponer que se refiere a que en algunos puntos se aprecia claramente que se trata de zanjas o pozas realizadas hace unos treinta o cuarenta años o quizás más. 
Por otra parte, resulta curioso que no se haya hablado de las informaciones recientes que hablan de más de veinte puntos con agua a ambos lados del río Gigüela, por cierto. Esa información apareció publicada en el Diario Lanza el día 9 de febrero de 2016 y fue facilitada al diario La Tribuna el día 7 de febrero.
De cualquier manera es de agradecer tanto a La Tribuna como al IGME el trabajo realizado, en particular a Miguel Megías y a A. Criado.




martes, 9 de febrero de 2016

Artículo sobre los Ojuelos del río Gigüela en el Diario Lanza, el 9 de febrero de 2016.

Siguen apareciendo afloramientos de agua en Los Ojuelos del Río Gigüela, en Villarrubia de los Ojos.
Francisco Zamora Soria, 7 febrero 2016.
A mediados del pasado diciembre de 2015, un vecino de Villarrubia de los Ojos, Conce Sepúlveda, se dio cuenta del afloramiento de agua en una zanja, en la zona conocida como Los Ojuelos, en el paleocauce del río Gigüela, en Villarrubia de los Ojos.
En unos días se fueron descubriendo otros afloramientos por parte del citado vecino como por otros. Varios equipos de científicos y técnicos de diferentes instituciones iniciaron igualmente el reconocimiento del terreno para estudiar el fenómeno.
Tras casi dos meses, el afloramiento de aguas se ha seguido produciendo. Por un lado se ha detectado en varias pozas y zanjas y, por otro, en pozos de noria abandonados. El nivel del agua se encuentra muy cercano a la superficie. Debemos recordar que se trata del cauce (o paleocauce) del río Gigüela, las llanuras de inundación de este río que se encharcaban periódicamente debido a las crecidas del río y que, además, mantenían manaderos de agua conocidos como “ojuelos”.
Por el momento hay más de veinte puntos con agua, a pesar del difícil año, pluviométricamente hablando y todo parece indicar que seguirán aflorando.
Mientras que en los primeros momentos se afirmó que no había agua en los pozos cercanos, una revisión más pormenorizada ha puesto de manifiesto su presencia en, al menos, cinco de ellos.
El hecho de que se haya detectado la presencia de plantas como la masiega podría indicar que o bien el agua ya hubiera aflorado con anterioridad en los últimos años o bien que se encontrara muy cercana a la superficie en la que ahora es visible, lo que habría permitido que esas plantas prosperaran.
El río Gigüela en este tramo, antes de adentrarse en el Parque Nacional de las Tablas, presenta una considerable cantidad de agua, que contrasta con la nula presencia en la estación de aforo de Arenas de San Juan y con la muy escasa en la de Villarrubia de los Ojos, la número 204.
La zona tiene una gran diversidad geomorfológica y destacan las dunas de origen eólico, los suelos de limo, las zonas de yesos y algunos “montecillos”, pequeñas elevaciones de escasos metros. Son varias las especies de plantas endémicas de gran interés como los albardines y el limonio, entre otras así como las aves estepáricas. Sus valores naturales y patrimoniales son muy importantes.
El río Gigüela presentaba un cauce muy llano, anastomosado, con diferentes cauces trenzados. En los años sesenta se encauzó, quedando reducido a un canal estrecho y rectilíneo con malecones. Dónde había hasta dos o tres kilómetros el río quedó reducido a unos veinte metros de anchura. Los manantiales desaparecieron debido a la extracción masiva de aguas subterráneas, entre otras causas coadyuvantes. Los pozos de noria quedaron secos durante decenas de años y algunas pequeñas fincas dejaron de cultivarse para su tradicional función de huertas.
Todavía hoy son visibles los restos de las zanjas que en otros tiempos avenaban estas tierras y servían tanto para drenar como para regar y pescar.  En algunas de ellas, ahora, está volviendo a manar el agua, debido a la recuperación del acuífero. En otros puntos el agua está aflorando en pequeñas depresiones hechas con máquinas hace tiempo. Son “pozas” de unos doscientos a cuatrocientos metros cuadrados, algunas mucho mayores, y en algunos casos con vegetación palustre típica de estos humedales.
Las dunas son uno de los grandes valores de esta zona, a pesar del grave deterioro que siguen sufriendo algunas de ellas. Se trata de formaciones de origen eólico, con una antigüedad de unos 12.000 años, aunque se han producido momentos o períodos de reactivación, incluyendo el momento actual.

El futuro debería pasar por el estudio, la planificación y la toma de decisiones tendentes a la conservación de los valores presentes, así como la restauración y recuperación de los elementos más degradados. Resulta evidente la gran importancia de la Educación, de una correcta divulgación, de la colaboración entre todas las administraciones e instituciones y el fluido contacto con la sociedad civil. No es menos relevante el gran potencial educativo, didáctico y científico de los Ojuelos, en particular, y del complejo hídrico con el que cuenta Villarrubia de los Ojos, en conexión con los municipios limítrofes. Recordemos que muy cerca se encuentran los Ojos del Guadiana y el nacimiento del mítico río, así como las Pozas de los Alpargateros, ya en el río Gigüela, además de las interacciones con los aportes de la cercana sierra en los llamados “hontanares y bodonales”.