El volcán de la Arzollosa de Piedrabuena ya se ha vestido de blanco en este febrero de 2024. El espectáculo durará sólo unos días y dado que hoy son previsibles lluvias quizás se acelere la caída de los pétalos de los almendros silvestres.
Las perdices ya van emparejadas y las urracas están con sus increíbles quehaceres hogareños. Los lirios todavía azulean en las cunetas y en el cercano maar de Navarredonda algunas gambas duende parecen aguantar hasta que los charcos, crecederos, les permitan prolongar sus vidas. Las gambas almeja firman con sus estelas en el agua barrosa y nos dicen que allí siguen, en ese rápido ir y venir.
Un tractor abona, ajeno a lo que está pasando en algunas carreteras y a lo lejos se escucha el traqueteo de otro que debe estar binando.
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