jueves, 14 de noviembre de 2019

¿Desapareció la Fuente del Moro de Alcolea de Calatrava?

Era el año 2017 cuando me dí cuenta de que la conocida como Fuente del Moro, del término municipal de Alcolea de Calatrava, Ciudad Real ya no vertía agua por su goma de plástico amarillenta.
Paré un par de veces a hacer fotos y no salía de mi asombro. Pregunté a una compañera, natural del municipio en cuestión y no me supo dar tampoco una explicación. 
La Fuente del Moro se encontraba junto a la carretera Nacional-430, entre Ciudad Real y Piedrabuena, en las proximidades de Benavente.
Esos terrenos son volcánicos y se trataba de un pequeño afloramiento natural, sobre el que no dispongo de información alguna.
Cuando busqué información apenas si conseguí un par de datos. Uno, que ya aparecía en un mapa topográfico de los años cuarenta del siglo XX y, el otro, que venía bastante gente a por agua desde Ciudad Real.

Fotografía tomada el 30 de agosto de 2011.

Preparé un cartel con algo de información, con una frase alusiva a la importancia de las fuentes y la necesidad de mantener su limpieza. Ese cartel desapareció en muy pocos días y el hierro que utilicé para ponerlo fue usado para sujetar la goma por la que salía el agua. Llevé a cabo algunas recogidas de basura pero me decepcionó comprobar lo poco que duraba. Como suele ser habitual, se le podía echar la culpa a las autoridades, al sistema educativo o a gobernantes del pasado pero lo cierto es que esa basura la tiraban personas con nombre y apellidos, una vez que habían parado allí a coger agua o a beber.
Lo cierto es que estamos en noviembre de 2019 y la Fuente del Moro sigue seca. Ahora casi no se identifica el punto en el que estaba dado que la vegetación va cubriendo los pocos metros cuadrados del pequeño espacio.
Nada sabemos de las causas que provocaron la desaparición. Si fueron las escasas precipitaciones, alguna intervención humana o un fenómeno hidrogeológico o geomorfológico no conocido por quién estas líneas escribe. Lo cierto es que la Fuente del Moro sigue seca y no sabemos qué ha podido ocurrir.

Fotografía tomada el 6 de octubre de 2017.

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