Hoy, 21 de diciembre de 2024, es el centésimo tercer aniversario del nacimiento de José García Ortega, más conocido como Pepe Ortega o el pintor Ortega. Nació en el precioso y pequeño pueblo de Arroba de los Montes, provincia de Ciudad Real. Era hijo de Cruz García Aparicio, natural de Picón y de Fabiana Ortega Fernández, arrobeña (1).
Muy pronto la familia se trasladó a Madrid pasando, algunas temporadas en el pueblo paterno. Tras la guerra civil su padre fue condenado a prisión y él se afilió al ilegalizado y perseguido Partido Comunista de España. En 1947 fue él el encausado y condenado a diez años. Aunque leemos en todos los libros, e incluso en algunas declaraciones suyas, que cumplió cinco años, en un estudio de reconocida solvencia se dice que fueron menos.
Tras salir libre gracias a un indulto viaja a París becado por el gobierno francés. Regresa a España y sigue tanto con su actividad artística como con la de activista político. Serán los años, por ejemplo de la fundación del grupo artístico y reivindicativo de Estampa Popular, primero de toda la Historia de España, como explica y documenta magistral mente la doctora Noemí de Haro.
Esa gran actividad política clandestina supone que la policía lo tenga fichado y localizado prácticamente en todo momento.
En ocasiones venía a Picón y a otro municipio de Ciudad Real "a quitarse de en medio", aprovechando la hospitalidad de unos familiares. En 1960 se exilia, residiendo en París aunque también alternará su vida con venidas clandestinas a España y con largas estancias en Italia. Allí pasó uno de los períodos más largos y fructíferos artísticamente hablando, de su carrera.
Su regreso "legal" a España se produjo en 1976 y, aunque mantuvo una intensa actividad política y creativa, volvió a Italia, ya concretamente a Matera y a Bosco, en el sur, donde se sentía como en su casa y en su tierra. Allí, en esa ciudad monumental, Matera, que pasó de ser "vergüenza nacional" a Patrimonio de la Humanidad y destino turístico, artístico y cultural de primer orden, hay un museo dedicado a su obra y su figura. Algo parecido ocurre en la costa del mar Tirreno en la pequeña aldea de Bosco, donde hay otra casa museo.
Tras su muerte, acaecida el 24 de diciembre de 1990 en París, se sucedieron los artículos "in memoriam" y se organizaron algunas exposiciones antológicas. En 1991 unos maestros pusieron su nombre al Centro de Profesores y Recursos de la llamada administrativamente entonces "Comarca Montes Norte" (2).
En 1993 el Centro de Exposiciones -CEX- de la Diputación Provincial de Ciudad Real, depositario de una buena representación de su obra, gracias a su viuda, Secundina Arroyo y a su hijo, Xuan García Arroyo, organizó una extraordinaria exposición y publicó un catálogo que todavía hoy seguimos admirando y usando como material bibliográfico de referencia.
En 1987 y 1988 se empieza a trabajar en la construcción de un museo en su pueblo natal, Arroba de los Montes, puesto que era su deseo y para eso había sido cedida la obra. El museo se inauguró el 5 de junio de 1999 y el año siguiente se cerró por un problema de humedades...Y, ¡hasta hoy!, veinticuatro años sin Ortega, más que a ratitos y en pequeñas porciones.
Como la Diputación Provincial no permitió, bajo ningún concepto, que se difundiera la noticia hoy, hay muchas personas que descnocen el dato y algunas fuentes bibliográficas lo siguen arrastrando en el sentido de hablar de varios, algunos o muchos años de vida de ese espacio expositivo. Era penoso comprobar, a diario, como el diario provincial de titularidad de la Diputación Provincial mantenía en la sección de museos de las últimas páginas la información, como si siguiera abierto, durante años. Unos amigos de Villarrubia de los Ojos, por ejemplo, a una distancia de más de 100 kilómetros, viajaron ex profeso, sin saber que llevaba mucho tiempo cerrado, fiándose de esa información periodística. Sobre el cierre del museo hay varias visiones y versiones y una realidad incontestable, y es que lleva 24 años cerrado, que Arroba de los Montes tiene, en la actualidad, 430 personas empadronadas y que el deseo de Ortega era tener un museo con sus obras en su pueblo natal. El resto son cuestiones de interés exclusivamente para las personas que nos gusta la Historia y que no deberían y no deben empañar las iniciativas actuales y el deseo de entendimiento, concordia y colaboración entre instituciones y partidos políticos..
Lo cierto es que el museo de Pepe Ortega sigue cerrado, que la obra depositada en el CEX, para que se conserve pero también para que se pueda ver, no está expuesta, salvo la serie de "Los segadores", y que el Museo de Ciudad Real, de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha tiene, sólo, una obra suya.
Entre medias ha habido algunas iniciativas públicas, privadas y de la ONG Solman, Solidaridad Manchega, que vienen haciendo lo que pueden para que la obra y la figura de Ortega no desaparezcan por completo.
El año pasado, 2023, un grupo de personas iniciamos los trámites para crear la "Asociación de Amigos del pintor Ortega". Hoy, ya terminando este año de 2024, la asociación es una realidad, contando con unas cien personas asociadas de todas partes de España y con alguna, muy significativa, de Italia.
Hemos organizado varias reuniones, tres, a saber: la primera, preparatoria, en la Facultad de Letras de la Universidad de Castilla-La Mancha, la segunda para dar a conocer la Asociación en Arroba de los Montes en el edificio vacío del Museo de Pepe Ortega, y una tercera en el Museo Elisa Cendrero de Ciudad Real para informar a las socias y socios de las gestiones llevadas a cabo. Además, hemos mantenido un buen número de reuniones con familiares de Ortega, particulares, expertos, algunos medios de comunicación y representantes de algunas instituciones. Estas son el Ayuntamiento de Arroba de los Montes, que desde el primer momento nos mostró su apoyo; la Diputación Provincial de Ciudad Real, que custodia la obra de Ortega; la Consejería de Educación y Cultura, que tiene las competencias en esta materia y que llevó a cabo una primera evaluación del estado del edificio del Museo y el Departamento de Historia del Arte, que ya está trabajando en la organización de unas jornadas o encuentro académico.
Además hemos asistido a diferentes actos académicos, culturales y artísticos y contactado con un buen número de especialistas en la materia. Hay muchas ideas, propuestas y proyectos sobre la mesa. Hemos conseguido bastantes contactos que hay que, no solo mantener, sino transformar en realidades tangibles. Hay un trabajo ingente que hacer y, sinceramente, toda ayuda es bienvenida. Hoy, 21 de diciembre de 2024, seguimos sin Ortega en Arroba de los Montes, en Ciudad Real y en España.
Hace poco más de tres semanas supimos, gracias a la información que nos aportó la directora del Museo Ortega de Matera, Italia, la doctora Simona Spinella, que habían recibido la donación de dos obras de Ortega. Sentimos o, lo expreso en primera persona, siento verdadera envidia. Y esta misma semana hemos contactado con la Fundación Francisco y Lola Cortijo, que vienen trabajando activa y acertadamente en la recuperación del legado de Estampa Popular de Sevilla, grupo del que fue su principal valedor inicial Pepe Ortega, allá por 1960, en su casa de París.
Aquí y ahora tenemos que empezar ya a cambiar esta dinámica tremenda de olvido que se parece mucho a una implacable censura, a ese "silencio riguroso" del que hablaba tan acertadamente el arquitecto, escritor y crítico de Arte José Rivero hace ya demasiados años.
(1) Se puede ver la genealogía en la entrada del blog de Jesús Víctor García y María Dolores Fernández Martín.
(2) Aunque no nos guste, es la denominación administrativa que se utilizaba.
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